Me gusta apoyarme en tu tristeza. Tu tristeza es como la luz de la luna, a la vez conmovedora y romántica. En tu tristeza siento el amor, y quisiera embriagarme en tu tristeza para siempre. Me gusta reposar en tus pensamientos, tus pensamientos son como la luz del sol, que serán cálidos y tendrán dirección. En tus pensamientos ya no estoy solo, quiero quedarme varado en tus pensamientos por mil años.