La historia del desarrollo de los medidores de flujo

Ya en 1738, el suizo Daniel Bernoulli utilizó el método de diferencia de presión para medir el flujo de agua basándose en la primera ecuación de Bernoulli. Posteriormente, el italiano G.B. Venturi estudió el uso de tubos Venturi para medir el flujo y publicó los resultados de la investigación en 1791.

En 1886, el americano Herschel utilizó un tubo Venturi para fabricar un práctico dispositivo para medir el caudal de agua.

Desde principios y mediados del siglo XX, los principios de medición primitivos maduraron gradualmente y la gente ya no limitó su pensamiento a métodos de medición primitivos, sino que comenzó nuevas exploraciones.

En la década de 1930 apareció nuevamente el método de utilizar ondas sonoras para medir el caudal de líquidos y gases, pero no fue hasta después de la Segunda Guerra Mundial cuando se lograron grandes avances. Apareció el método para medir el flujo de combustible de aviación utilizando el método de circulación de ondas sónicas.

Después de la década de 1960, los instrumentos de medición comenzaron a desarrollarse hacia la precisión y la miniaturización.

Con el rápido desarrollo de la tecnología de circuitos integrados, los medidores de flujo ultrasónicos (ondas) que utilizan tecnología de bucle de bloqueo de fase también se han utilizado ampliamente. La aplicación generalizada de microcomputadoras ha mejorado aún más las capacidades de medición de flujo. Por ejemplo, los velocímetros láser Doppler pueden procesar señales más complejas utilizando microcomputadoras.