En primer lugar, familiarícese con el plan de estudios.
Cuando empiezan las clases, los niños están muy interesados en publicar el plan de estudios. Todos compran varios trabajos de "cursos" y luego copian los cursos y los pegan en el libro. Creo que este es un buen hábito, así que utilizo situaciones para guiar a los niños a diseñar sus propios cursos, y luego les dejo que los memoricen y discutan: ¿Cómo hacer que los cursos realmente nos sirvan? De hecho, estos niños lo conocen desde hace mucho tiempo, pero aún son pequeños y necesitan recordatorios constantes. Después de repetidos recordatorios en diferentes formas, entendí la necesidad de hacer una vista previa antes de clase.
Segundo entrenamiento intensivo
Según mi observación, la preparación antes de la clase en nuestra clase está bien, pero tenemos la costumbre de no poner estuches de lápices sobre el escritorio. Coloque estuches sobre el escritorio. Hay muchas reglas y otros utensilios que son convenientes para la clase, pero los escritorios están desordenados, lo que brinda a los pacientes con TDAH una "buena oportunidad" para jugar. Luego de descubrir este fenómeno, me concentré en rectificarlo por un tiempo, requiriendo el uso de estuches y no soltar más material de oficina, y el efecto fue bueno. El mayor problema en nuestra clase es que no podemos estar tranquilos. Algunos incluso van al baño tan pronto como suena el timbre. En respuesta a este fenómeno, los requisitos deberían ser estrictos en tiempos normales, especialmente por primera vez. Por lo general, a los maestros no se les permite usar el baño cuando suena la campana. Por ejemplo, los niños de cuarto grado pueden soportar una lección incluso si están un poco impacientes. Al igual que el fenómeno de las campanas que todavía suenan, demasiadas críticas logran poco. A veces les pido a mis hijos que escriban lo que quieren decir. Después de repetirlo varias veces, la situación mejoró gradualmente.
En tercer lugar, formular un determinado sistema de recompensas y castigos
Nuestra clase hace los deberes en grupos y la preparación antes de la clase es la misma. Inevitablemente habrá elogios o críticas, por lo que habrá. Habrá comprensión mutua entre los miembros del equipo. Recordarse mutuamente que deben supervisar. Premia al grupo que lo hace bien y castígalo si no lo hace, como no salir a jugar después de clase. De esta manera, los miembros del equipo con un fuerte sentido de responsabilidad supervisarán a esos niños traviesos y luego se transformarán gradualmente en acciones conscientes de los estudiantes.
A medida que los estudiantes desarrollen buenos hábitos de estudio, se establecerá un orden de enseñanza estable. Este orden de enseñanza estable promoverá la armonía entre profesores y estudiantes, promoverá la armonía de la atmósfera de enseñanza y luego formará la belleza de la enseñanza, el estado más elevado de la enseñanza. Los profesores enseñan con tranquilidad y disfrutan de la alegría del trabajo; los estudiantes aprenden felices y experimentan la alegría del éxito.