Realiza un autotest sobre las preguntas reales y conoce los detalles.
En los últimos años, especialmente los exámenes de simulación de pruebas reales de los últimos años, pueden reflejar mejor la dificultad real del examen. ¡No olvide simular un entorno y un tiempo de prueba reales! Lo importante es analizar las preguntas equivocadas, comprobar si hay omisiones y llenar los huecos, volver al libro de texto y sentar una base sólida.
Explore las reglas para formular preguntas y sepa qué esperar.
Después de completar las preguntas reales, resuma la dirección, el patrón y la distribución de los puntos de la prueba, comprenda los errores comunes y los principios para establecer respuestas correctas y señale la dirección para su revisión.
Tome las preguntas reales como guía para construir un sistema de conocimiento.
Las preguntas reales son sólo una parte de la revisión. Lo importante es volver al libro de texto, consolidar los conocimientos básicos y establecer un sistema de conocimientos completo.
Rehacer las preguntas reales y encontrar las omisiones.
¡No creas que es inútil volver a hacer la prueba real! Al hacerlo una y otra vez, descubrirás los errores que eres propenso a cometer y evitarás volver a cometerlos en el examen.