En el artículo, Rodin describe e imagina el proceso de la escultura. A veces parece que la idea es fluida, por lo que es simple y fluida de un solo golpe. A veces paso mucho tiempo pensando en la gordura de un brazo y en la relajación de cada movimiento. Al mirar retrospectivamente el producto final de este doloroso borrador, naturalmente podemos trazar un camino aproximado: en la conciencia de Rodin, de la nada a algo, un rayo de luz, y finalmente lentamente se fue elaborando y logrando, y fue completado por su cuchillo de trinchar. Zweig quedó impresionado por la concentración de Rodin y trabajó duro para resaltar la meticulosidad del trabajo de Rodin. Por el comportamiento, movimientos y lenguaje de Rodin al esculpir, puedo apreciar su actitud de trabajo seria, dedicada y cautelosa y su estilo de vida fácil, humilde, sencillo y amigable. Entiendo que el secreto del éxito en todas las artes y grandes empresas es la concentración. Para hacer algo bien, debes concentrar toda tu energía y voluntad en una sola cosa. Quiero aprender de su actitud seria, atenta y cuidadosa en mis estudios, y quiero aprender de su sencillez, humildad, sencillez y amabilidad en el trato con las personas.