2. Establecer un concepto científico del consumo. El concepto científico de consumo muestra tanto el coraje de gastar dinero como la capacidad de gastar dinero. Es una unidad racional del coraje de gastar dinero y la capacidad de gastar dinero. En la práctica del consumo, no es difícil atreverse a gastar dinero. Lo difícil es atreverse a gastar dinero y poder gastar dinero. Esto es precisamente de lo que carecen los jóvenes estudiantes con poca experiencia de vida. A menudo carecen del impulso de consumir, así como de la racionalidad y el cálculo en el consumo, por lo que tienden a sobreestimar sus capacidades, seguir ciegamente las tendencias, ser extravagantes y desperdiciar dinero sin motivo alguno, lo que demuestra su falta de conocimiento y capacidad en la gestión financiera. . Por lo tanto, debemos prestar atención al cultivo de habilidades básicas de gestión financiera en los estudiantes universitarios para que puedan establecer valores científicos y conceptos de consumo.
3. Formar un buen patrón de consumo. Debemos guiar a los estudiantes universitarios para que establezcan un estilo de vida de consumo saludable y civilizado. En primer lugar, debemos guiarlos para maximizar los beneficios de cada centavo basándose en la realidad objetiva, presupuestar cuidadosamente, actuar dentro de sus capacidades, hacer arreglos generales y planificar racionalmente. Los estudiantes universitarios pueden desglosar sus deseos de consumo en función de sus propias realidades económicas. Por un lado, pueden dividir sus expectativas de consumo en objetivos de corto plazo, de corto plazo y de largo plazo. Por otro lado, pueden subdividir la cantidad de su consumo: cuánto se usa para vivir, cuánto se usa para aprender, cuánto se usa para cultura y entretenimiento, y determina aproximadamente un límite para asegurar las necesidades reales de estudio y vida. En segundo lugar, coordinar la relación entre el consumo material y el consumo espiritual. Los estudiantes universitarios se encuentran en un período de absorción de conocimientos científicos y culturales. Su tarea más importante es estudiar, y el consumo espiritual y cultural representa una gran proporción, como la compra de libros extraescolares. Al mismo tiempo, debemos garantizar las necesidades de la vida y ampliar el gasto en conocimientos. Cuando todavía te quede suficiente dinero, considera otros consumos materiales y gastos culturales y de entretenimiento. Por lo tanto, los estudiantes universitarios deben aclarar los estándares de consumo en función de la situación real de vida, estudio, cultura y entretenimiento, hacerlo dentro de sus capacidades, consumir moderadamente, no aumentar la carga para sus familias y desarrollar un buen patrón de consumo.
4. Potenciar la conciencia de independencia y cultivar y fortalecer las capacidades de gestión financiera. Los estudiantes universitarios de hoy necesitan saber cómo sobrevivir en una sociedad ferozmente competitiva, por lo que la capacidad de administrar el dinero de forma independiente se ha convertido en la más importante. La gestión financiera no es una simple operación de las cuatro aritméticas, ni tampoco una simple balanza de pagos. Se necesita una base racional a largo plazo. El impulso ciego personal no es independencia, sino una manifestación de obstinación. No sólo necesitamos conceptos independientes en nuestra mente, sino también acciones independientes y pensamiento racional. Incluye principalmente dos aspectos: primero, la capacidad de comprender correctamente la moneda y sus leyes; segundo, la capacidad de utilizar correctamente la moneda y sus leyes;