Mirando con emoción los huevos que llevan 21 días plantados.
Lo único que puede hacer es ir demasiado lejos y ponerse un disfraz de gallina.
Hombre, estoy seguro: si ella quiere venir, vendrá.
Ya hecho.
Pero bueno, lo dejé. Esa es una fuerza enorme, ¿verdad? Pero, de repente, tenía un año.
Más tarde, sosteniendo un cartón de huevos casero. Pero yo
ella se emocionó cuando no volvió a sacar todos los estúpidos proyectos del listón azul de su miseria.
Cuando mi madre se asomó al pasillo y dijo:
"¿Quién es, cariño? ¿Qué tienes? ¿Huevos?"
Lo noté por su rostro Era obvio que quería echar un vistazo. "Sí", dije, entregándomelo.
Se lo regalaron. "Pero estoy en el cereal."
Abrió la caja y dejó caer su sonrisa. "¡Eso es genial!", dijo. "¿Quién los trajo aquí?
¿Se acabó?"
"Julie. Ha crecido."
"¿Creció?"
"Bueno, sus gallinas también."
"¿Oh?" Su sonrisa comenzó a desvanecerse cuando abrió la caja de nuevo. "Así es. No la conozco.
Hay... gallinas."
"¿Recuerdas? Tú y papá pasasteis una hora mirándolas en la feria de ciencias del año pasado. ¿Eclosión?"
"Bueno, ¿cómo sabemos que no es una gallina en un huevo?"
Me encogí de hombros. "Te lo dije, tengo cereales".
Todos comemos cereales, pero estamos hablando de huevos. Mi papá pensó que estarían bien.
Cuando era niño, bebía huevos frescos de granja.
Decía que estaban deliciosos. Mi madre, aunque no podía evitarlo, podría romper un pollo muerto, habla de eso de inmediato.
Pasando al papel del gallo: esto es lo que puedo hacer con el cereal.
Finalmente, Lynetta dijo: "Si tuvieran un gallo, ¿no crees que lo sabríamos?"
¿Lo sabrá toda la comunidad? "
Bueno, todos dijimos que era mejor. Pero entonces mi mamá se hizo cargo. "Tal vez lo sabían.
Yordelder. Ya sabes, ¿como si fueran y ladraran al perro?
“Se le fue un gallo a Yodred”, dijo mi papá, a quien le pareció lo más gracioso que había escuchado en su vida.