1. Elogiar y admirar a los niños: Todo el mundo quiere aplausos y elogios, especialmente los niños. Las madres deben elogiar y valorar la educación de su hija, para que ésta pueda comprender lo bueno y lo malo de lo que ha hecho desde el fondo de su corazón.
2. Utilice acciones prácticas para influir: Los padres son los primeros maestros de sus hijos. Las madres deben utilizar acciones prácticas para influir en sus hijas, para que sus hijos puedan aprender de sí mismos y convertirse en buenos niños.