¿Cómo es el funeral de un profesor de etiqueta?

El director de funeraria es una profesión especial, que se refiere a una persona que se dedica a tareas específicas como la preservación del cuerpo y la cirugía plástica en una funeraria. Indispensable en la ceremonia fúnebre es el enterrador, quien también puede encargarse del funeral. El trabajo específico es armar, recortar y decorar el cuerpo según la apariencia del difunto en vida. Recogerán el cuerpo y lo guardarán en hielo, lo revisarán y limpiarán, utilizarán cosméticos, medicinas y equipos para congelarlo y conservarlo, y le aplicarán maquillaje. A veces necesitan masajes calientes o el uso de suavizantes especiales para cerrar los ojos y la boca, rellenarles la cara con tela o pegarlos.

Ya en la antigua China los enterradores no tenían esta profesión, sino que procedían de Occidente. Todos los días se ocupan de restos humanos sin vida, realizan reparaciones cosméticas en los cadáveres, se aseguran de que puedan regresar a la carretera intactos y hermosos y también brindan consuelo a sus familiares vivos, lo cual es digno de respeto.

Los funerarios son una profesión misteriosa y especial, y pocas personas conocen su existencia. Inevitablemente, mucha gente siente curiosidad por ellos y su trabajo. Es posible que enfrenten la desaprobación de sus familiares y dificultades en su vida amorosa. Sin embargo, hicieron los últimos trámites para que el fallecido pudiera caminar dignamente. Son los "últimos puestos de la vida" y merecen el respeto de todos.