Fuimos a acampar a un pequeño pueblo de la India. Primero tomamos un autobús de larga distancia hasta un pequeño lago cerca del campo. Allí armamos nuestras tiendas y encendimos un fuego para calentarnos y cocinar. La primera noche de campamento, nos sentamos juntos bajo la luz de la luna y nos contamos historias. Pero estaba demasiado cansado, así que me acosté temprano.
A la mañana siguiente, mi hermana y yo estábamos conmocionados y asustados. Cuando miramos fuera de la tienda vimos una serpiente gigante durmiendo junto a la fogata. Estaba demasiado asustado para caminar. Les gritamos a nuestros padres para avisarles del peligro. Mi papá empezó a saltar arriba y abajo en su tienda. El padre hizo esto para despertar a la serpiente, y esta corrió hacia el bosque cerca del lago. Más tarde, mi padre me dijo que las serpientes no tienen orejas, pero pueden sentir el movimiento de los objetos. También me dijo que lo más importante es alejarse de las serpientes. Esta fue una lección muy útil para mí.