La tortuguita es quisquillosa y se come un grano de arroz tres veces.
El cuello es delgado, la cola es delgada, los párpados caídos y no hay fuerza.
El ratoncito es quisquilloso y solo come cacahuetes y chocolate.
El cuello es delgado, la cola es delgada y el cerebro es débil.
El osito no es exigente con el arroz, las verduras, la carne y el pescado.
¡Tartamudeo, sonrojado y sonriendo!