Solo en las personas más humildes podemos tener la oportunidad de ver la sabiduría del mundo. Una persona no teme los altibajos y no será excluida. Puede mantener su inocencia y su naturaleza y trabajar duro para lograr lo que puede.
Son aquellos que hablan con humildad quienes tienen más posibilidades de ver la verdad del mundo sobre la condición humana. Si no quieres escalar, no tendrás miedo de caer, y si no luchas contra las multitudes, podrás mantener tu inocencia, ser natural y concentrarte en completar lo que puedes hacer.