Según las normas educativas de mi país, las escuelas no pueden utilizar puertas traseras. Por lo tanto, si los estudiantes entran por la puerta trasera, su tiempo en la escuela no será especial. Deben asistir a la escuela en los horarios designados como los demás estudiantes.
Por supuesto, si los estudiantes ingresan a la escuela por la puerta trasera, entonces tal comportamiento no es ético y va en contra de la ley. Este tipo de comportamiento no sólo dañará el principio de competencia leal, sino que también afectará la calidad y reputación de la escuela. Por lo tanto, debemos hacer hincapié en la competencia leal, oponernos a cualquier forma de fraude y trampa y hacer que las admisiones escolares sean más justas, equitativas y abiertas.