El uso de cuestionarios para evaluar la calidad de la educación infantil tiene las siguientes ventajas: objetividad, estadística, conveniencia, retroalimentación y comparabilidad.
Objetividad: Los cuestionarios pueden recoger opiniones y puntos de vista de muchas personas, obteniendo así resultados de evaluación más objetivos y evitando interferencias subjetivas. Estadísticas: el método del cuestionario puede realizar análisis estadísticos de datos para obtener números y proporciones específicos, que pueden reflejar con mayor precisión la calidad de la educación preescolar.