1. Nivel fenomenal, también conocido como cuestiones de nivel fáctico. Este tipo de preguntas es fácil de despertar el * * * de la audiencia y es fácil lograr buenos resultados si se plantean bien. Pero hay que tener cuidado de no desviarse del debate por la novedad, que tendrá efectos negativos.
2. El nivel teórico, también llamado nivel de argumentación. Esto es ampliar los propios argumentos y refutar los argumentos de la otra parte. Para este tipo de preguntas, la pregunta directa debe ser aguda, la pregunta indirecta debe ser inteligente, la pregunta retórica debe ser oportuna y la pregunta apremiante debe tener tacto. El efecto es hacer que a la otra parte le resulte difícil responder y no pueda evitarlo.
3. Nivel de valor, también conocido como nivel de efecto social. Esto es extender los argumentos y posiciones de la otra parte, y extender sus efectos desde el nivel de valor y efecto social para ver si es persuasivo y sostenible. Por un lado, este tipo de preguntas puede ampliar el campo de batalla para el debate libre y hacer que la otra parte se vuelva pasiva. Por otro lado, también es un aspecto importante para ganarse el reconocimiento de la audiencia y los jueces. Si la posición del debate es desfavorable para nuestro lado, debemos utilizarla con cautela para evitar darnos un tiro en el pie.
Entre estos tres tipos de preguntas, las preguntas fácticas pueden incluir acontecimientos históricos, hechos realistas, hechos nacionales, hechos numéricos, etc. Además de los argumentos posicionales, las cuestiones teóricas también pueden extenderse a niveles axiomáticos y filosóficos.