¿El melón amargo necesita tenedor?

El cultivo del melón amargo requiere hibridación.

Después de que las enredaderas de melón amargo suben al estante, no se pueden dejar melones por debajo de la longitud de la enredadera principal, 50 cm. Al mismo tiempo, puedes recoger esas flores femeninas para facilitar el crecimiento de toda la planta de melón amargo.

Cuando la enredadera principal esté lo suficientemente estable como para dar seis o siete frutos, deja cinco o seis hojas y recógelas para no dejar que la enredadera crezca demasiado, y luego retira todas las enredaderas laterales excepto las. Sólo queda una vid principal para dar fruto.

Cuando las plántulas crezcan hasta tener 5-6 hojas verdaderas, se debe plantar bambú a tiempo para construir un cobertizo. Generalmente, los andamios se construyen en forma de ∏ para que las ramas y enredaderas se distribuyan uniformemente sobre el andamio. Cuando las plántulas alcancen los 50-60 cm, las enredaderas se pueden introducir en el cobertizo.

Datos ampliados

Tecnología de cultivo del melón amargo

1. El melón amargo no tiene requisitos estrictos de tierra y se puede cultivar en varios suelos. Sin embargo, tiene un sistema radicular bien desarrollado, muchas raíces laterales y una amplia masa radicular. Es resistente a los fertilizantes y a la esterilidad, le gusta la humedad y evita el encharcamiento. Por ello, lo mejor es elegir terrenos cercanos a fuentes de agua, con suelo profundo, suelo suelto y buen drenaje. Antes de sembrar, la tierra debe ser arada, planchada y rastrillada para hacerla profunda, suelta, fértil, quebrada y plana para sentar las bases de altos rendimientos.

En segundo lugar, al melón amargo le gusta estar mojado y no se le permite acumular agua. Se puede utilizar agua según las condiciones secas y húmedas del suelo. Generalmente en los días soleados, el sol se evapora violentamente y el agua desaparece rápidamente. Se requiere un riego oportuno para asegurar sus necesidades fisiológicas de agua y evitar el marchitamiento por sequía, que afecta el crecimiento, desarrollo, floración y fructificación de las plantas. En caso de fuertes lluvias, el agua debe drenarse a tiempo para evitar la pudrición de las raíces causada por la acumulación de agua en el campo.