Los experimentos de Ebbinghaus revelaron los secretos de la memoria humana. Cuanto más recuerde, más rápido será probable que lo olvide sin una revisión adecuada. De hecho, la teoría de la curva del olvido de Ebbinghaus establece principalmente que después de una hora, en promedio, solo se puede garantizar que no se olvidará el 44,2% del contenido recién almacenado en el cerebro, y cuando hayan pasado dos días, esta proporción caerá del 44,2%. al 27,8 %. Han pasado muchos días y es posible que la gente en ese momento no recuerde mucho. Esta teoría explica principalmente la importancia de la revisión y cree que todos tendremos el mismo sentimiento en la vida, es decir, las cosas que se revisan con frecuencia se pueden recordar con mayor firmeza.
A partir del gráfico, la curva del olvido de Ebbinghaus se puede dividir en dos etapas. La primera etapa es su rápido declive; la segunda etapa es su declive gradual. La primera etapa nos dice que en el periodo inicial, si no repasamos lo aprendido, nuestra memoria se verá muy perjudicada. La segunda etapa nos dice que después de cada revisión y consolidación, la velocidad de olvido será mucho menor que la última vez hasta que se forme la memoria a largo plazo.
Así que la curva del olvido de Ebbinghaus aboga por contrarrestar el “olvido” mediante la revisión. Mientras lo repitas más veces, lo recordarás con mayor firmeza. Es por eso que cada salón de clases de secundaria publicará una curva de olvido de Ebbinghaus, que advierte a los estudiantes que digieran, consoliden y recuerden el conocimiento que han aprendido a través del aprendizaje repetido, para que puedan recordar fácilmente el conocimiento preciso en la sala de examen.