En segundo lugar, la revolución tuvo un gran impacto en la propia Gran Bretaña y proporcionó garantía para el desarrollo de la economía capitalista; allanó el camino para el establecimiento del sistema político y económico capitalista.
En tercer lugar, la revolución burguesa británica tuvo un impacto de amplio alcance en el mundo. Es un reflejo inevitable del desarrollo de la sociedad humana, representa la dirección del desarrollo social y refleja en gran medida las necesidades del mundo entero en ese momento. Desde entonces, algunos países de Europa y otras partes del mundo han llevado a cabo diferentes formas de revoluciones bajo su influencia, llevando la historia mundial a una nueva era, es decir, una nueva era de revolución burguesa.