Malentendido 2: La preparación de fondos para estudiar en el extranjero es temporal. Enfoque correcto: Una de las características de estudiar en el extranjero es que se necesita una gran cantidad de fondos en un corto período de tiempo, por lo que es mejor preparar los fondos para estudiar en el extranjero con uno o dos años de anticipación, en particular, estudiar en el extranjero. La libreta debe guardarse un año antes de la solicitud.
Mito 3: Al enviar dinero, utilice efectivo. Enfoque correcto: mi país tiene regulaciones estrictas sobre las cuotas de entrada y salida de efectivo en divisas, y el exceso solo puede remitirse mediante remesas. Si saca una gran cantidad de dinero en efectivo fuera del país, será detenido y, en casos graves, será responsable de infringir la ley. Se recomienda enviar dinero al extranjero y enviarlo directamente después de comprar divisas en el banco. El procedimiento es más sencillo y el coste es menor. Si retira efectivo y luego lo envía, la tarifa será mayor porque existe una diferencia de precio de compra y venta al convertir efectivo en efectivo. Al mismo tiempo, si el depósito en efectivo supera los 5.000 dólares estadounidenses, debe explicar el origen del efectivo al banco.
Mito 4: Los depósitos han estado “congelados” durante demasiado tiempo. Enfoque correcto: Dependiendo de la normativa del país donde estudias en el extranjero, el tiempo de depósito debe ser de 3 meses, 6 meses, 1 año o 1,5 años. Antes de solicitar un certificado de depósito del período correspondiente, lo mejor es informarse con antelación. Durante el período de certificación, el banco congelará el depósito. Se recomienda conservar el certificado emitido por el banco. Si no se presenta a la escuela debido al rechazo de la visa, el banco aún puede descongelar el depósito en cualquier momento, lo cual es conveniente y rápido.
Mito 5: Las divisas no pasan por canales formales. Enfoque correcto: la gestión de divisas del país es muy estricta, pero para los estudiantes internacionales es relativamente fácil cambiar y remitir dinero. Actualmente, muchos bancos han abierto servicios de cambio de divisas y remesas. A través de los canales normales, cada persona puede cambiar divisas por un valor de 50.000 dólares estadounidenses al año, lo que puede satisfacer las necesidades normales de estudio y vida.