La flora intestinal controla el patrón dietético del huésped para sobrevivir y reproducirse, pero también para eliminar a los competidores microbianos de al lado. El intestino es el campo de batalla de estas bacterias, y manipular el cerebro del huésped para que consuma alimentos específicos es su principal arma. A veces incluso ponen en peligro a sus anfitriones haciéndoles comer alimentos nocivos. Los estudios han encontrado que las personas con una diversidad insuficiente en su flora intestinal (donde un tipo de bacteria manipula el cerebro para matar todas las demás bacterias) tienen más probabilidades de ser obesas.
El artículo enfatiza que la microbiota intestinal no es el único factor en la obesidad, pero los autores encontraron que algunos estudios sugieren que la microbiota puede ser contagiosa, incluidas las responsables de comer en exceso.
Entonces, ¿por qué no podemos usar inmediatamente un montón de antibióticos para genocidio las bacterias en nuestros intestinos? Pues bien, el artículo explica que estos microorganismos tienen funciones importantes como "la ingesta de nutrientes y el desarrollo inmunológico", es decir, nos aportan vitaminas y minerales y construyen nuestro sistema inmunológico a cambio de sobrevivir en nuestro cuerpo. Estas comunidades microbianas también ayudan al huésped a digerir ciertos alimentos. Las personas que viven en Japón tienen una bacteria especial que les ayuda a digerir las algas. Algunos niños africanos que comen tallos de sorgo tienen bacterias que les ayudan a digerir la celulosa.
Sin embargo, afortunadamente, el microbioma de cada persona se puede controlar fácilmente mediante cambios relativamente simples en los hábitos alimentarios.
Si le preocupa la composición de su microbioma, comprenda que cambiarlo a través de la dieta puede llevar solo unos minutos; ese es el tiempo que tarda su microbioma intestinal en evolucionar, y son solo 24 horas. Este es el tiempo que tarda el microbioma intestinal en reconstruirse después de un cambio en la dieta. Cambiar las bacterias en su intestino puede ayudar a cambiar sus hábitos alimentarios y viceversa.
“Dado que las personas pueden manipular fácilmente su microbiota mediante el uso de prebióticos, probióticos, antibióticos, trasplantes fecales y cambios en la dieta, alterar el microbioma nos proporciona una solución fácil de implementar para problemas que son difíciles otras cosas, como la obesidad y las dietas poco saludables", escribieron los autores en una declaración.
Además de hacer la vida más saludable, "actuar sobre el microbioma también puede prevenir y tratar muchas enfermedades, como la obesidad, la diabetes e incluso el cáncer gastrointestinal", afirmó Aktipis. "Apenas estamos empezando a comprender la importancia del microbioma para la salud humana."