Para los pacientes con síntomas leves se realiza un tratamiento no quirúrgico como el entrenamiento de la función de cierre velofaríngeo. Aquellos con síntomas graves requieren tratamiento quirúrgico. Los pacientes en los que la cirugía fracasó, no están dispuestos a someterse a un tratamiento quirúrgico o tienen defectos anatómicos graves que no pueden corregirse mediante cirugía pueden ser tratados con prótesis.
Tratamiento quirúrgico: cirugía de retroceso del paladar blando, cirugía de colgajo de pared faríngea posterior, cirugía de colgajo de músculo velofaríngeo, relleno de pared faríngea posterior, cerclaje velofaríngeo, etc.
Otros tratamientos:
1. Tratamiento restaurador: restauraciones con oclusor (incluidos restauraciones con oclusor maxilar y faríngeo) y aparatos que ayudan a mejorar la función del paladar blando (incluidos aparatos de elevación del paladar blando, proceso faríngeo). y aparato de soporte palatino).
2. Entrenamiento funcional: entrenamiento de la función de cierre velofaríngeo (entrenamiento de la función de cierre velofaríngeo soplando globos, soplando armónica, soplando burbujas, etc.), entrenamiento del lenguaje (entrenamiento de la función del lenguaje practicando la pronunciación, el canto y la lectura en voz alta). ), etc.