El taro tiene una larga historia en China, con tradiciones de cultivo y consumo que se remontan a miles de años. El taro se cultivó y consumió ampliamente durante varias dinastías en China. Las siguientes son algunas dinastías en las que el taro era popular:
Dinastías Qin y Han:
Durante las dinastías Qin y Han, el taro se había convertido en uno de los cultivos alimentarios importantes. Según registros históricos, el taro se plantó a gran escala durante el período Qin Shi Huang, principalmente en el sur. El taro se convirtió en uno de los principales alimentos para los soldados de la dinastía Qin en ese momento, ayudándolos a mantener sus fuerzas durante la guerra.
Dinastía Tang:
El taro se hizo aún más popular en la dinastía Tang. Debido a la prosperidad económica y el crecimiento demográfico de la dinastía Tang, la demanda de taro también aumentó. El taro se cultivó ampliamente en la región sur durante la dinastía Tang y se convirtió en uno de los principales alimentos para los residentes locales.
Dinastía Song:
La dinastía Song fue un período de prosperidad para la cultura china y un período importante para las tradiciones alimentarias y de plantación de taro. El taro se convirtió en uno de los cultivos económicos más importantes de la dinastía Song, ampliando su superficie de plantación y aumentando su producción. Al mismo tiempo, la cultura alimentaria de la dinastía Song también promovió la diversificación de los métodos de cocción del taro, como la barbacoa de taro, la sopa de taro, etc.
Dinastías Yuan, Ming y Qing:
Taro continuó manteniendo su importante posición durante las Dinastías Yuan, Ming y Qing. El valor nutricional y medicinal del taro se describen en detalle en "Eating Food" de la dinastía Yuan y "Compendio de Materia Médica" de la dinastía Ming. El taro se convirtió en uno de los cultivos alimentarios importantes en el sur de China durante la dinastía Qing y gradualmente formó una cultura alimentaria del taro con características locales.
Además de China, el taro también se cultiva y se consume ampliamente en otros países y regiones asiáticas. Por ejemplo, en Japón, el taro se ha convertido en uno de los alimentos tradicionales importantes, como el arroz y la sopa de taro. En Corea, el taro también se ha convertido en uno de los ingredientes comunes, como las gachas de taro coreanas, los chips de taro fritos, etc.
En definitiva, el taro tiene una larga historia de cultivo y consumo en China y otros países y regiones asiáticas. Su valor nutricional y medicinal son ampliamente reconocidos y gradualmente se ha ido formando una cultura alimentaria con características locales.