El sistema de navegación Tacon, el sistema de navegación Dimei, el radar de navegación Doppler y el sistema de navegación Roland C aparecieron en la década de 1950. En la década de 1960 aparecieron el sistema de navegación por satélite "Meridian" y el sistema de navegación Omega de ultra largo alcance. En la década de 1970 también se desarrollaron y pusieron en uso con éxito sistemas de aterrizaje por microondas, sistemas de medición simultánea y de posicionamiento global. El sistema terrestre Omega se construyó a principios de los años 1980. También se han puesto en uso sistemas de posicionamiento global de alcance síncrono.
En 1992, la Estación Aérea Sueca probó el último sistema de navegación. Con la ayuda de señales de satélite, el sistema permite que el avión aterrice sin problemas en la pista. Estados Unidos participó en el desarrollo de este sistema. Gestionados por el Departamento de Defensa de EE. UU., estos satélites son parte de una constelación global de satélites que recopila y transmite información de ubicación para una variedad de objetivos de observación. Las pruebas realizadas en Suecia han demostrado que el sistema tiene un error máximo de 3 a 4 metros. Para evitar la captura del enemigo, las señales emitidas por el satélite se transmiten distorsionadas, de modo que normalmente sólo pueden recibirse en un radio de no más de 100 metros desde el centro receptor de señales. El objetivo principal del nuevo sistema es formar una "bola de seguridad" única con un radio de 150 metros alrededor de cada avión. Siempre que se traspase el límite de la "bola de seguridad", se activará el dispositivo de señalización de alarma automática y la "violación" se mostrará claramente en la pantalla de inmediato.