2. Formar a los niños para que comprendan. La comprensión auditiva se refiere a la capacidad del niño para distinguir sonidos y comprender el habla. Los padres deberían hablar más con sus hijos, exponerlos a diversos sonidos y enriquecer el vocabulario relacionado con la vida de sus hijos. Por ejemplo, asignar verbalmente tareas a los niños para que las completen; juzgar historias idiomáticas, responder preguntas, etc.
3. Entrenar la capacidad de memoria auditiva de los niños. La capacidad de memoria auditiva se refiere a la capacidad de los niños para retener y repetir diversa información que escuchan. A través del entrenamiento de la capacidad de la memoria auditiva, no solo puede fortalecer la memoria auditiva de los niños y la amplitud de la percepción auditiva, y reducir la aparición de incapacidad de los niños para recordar información auditiva a largo plazo, sino también promover la exposición de los niños a conocimientos nuevos y antiguos, generar asociaciones y fortalecer su comprensión de los conocimientos adquiridos. Los padres pueden elegir algunas frases de diferente dificultad que les interesen a sus hijos, dejar que los escuchen atentamente, imitar las expresiones y mejorar la capacidad de memoria auditiva de los niños.
4. Entrenar la capacidad de clasificación de los niños. La capacidad de secuenciación auditiva se refiere a la capacidad de un niño para recordar información obtenida a través de la audición en el pasado en un orden correcto y detallado, y para organizar la información auditiva obtenida para que sea significativa. Es muy beneficioso para los niños retener sistemáticamente los conocimientos aprendidos. Esta capacidad se puede mejorar dejando que los niños escuchen relatos de cuentos y memoricen números al revés.
5. Entrenar la capacidad de escuchar y hablar de los niños. En la vida real, escuchar y hablar son siempre inseparables. Los niños que no pueden escuchar siempre hablan de forma incoherente. La combinación de escuchar y hablar implica la capacidad del niño para asociar, razonar, analizar y juzgar palabras. Los padres pueden entrenar las habilidades auditivas y orales de sus hijos enseñándoles a decir sinónimos y antónimos, escuchando música para hacer asociaciones, completando oraciones, escuchando historias e inventando finales de historias.
6. Los alumnos de primaria tienen mala tolerancia del sistema nervioso. Estar en un estado de tensión durante mucho tiempo o realizar tareas escolares monótonas puede provocar fatiga. Deje que sus hijos miren televisión y jueguen durante mucho tiempo por la noche, y nunca los inste a acostarse y levantarse temprano, lo que provocará falta de sueño, que también es la razón por la que los niños no pueden concentrarse. Por lo tanto, se debe establecer un horario razonable todos los días para permitir que los niños descansen y duerman lo suficiente para asegurar energía.
7. Concretar objetivos y potenciar su motivación. La mayoría de las personas se ven fácilmente afectadas por refuerzos de corto plazo, relativamente específicos y definidos, y no por cosas distantes, relativamente abstractas y vagas.