¿Puedo correr durante mi período?
Si estás débil durante la menstruación, no se recomienda trabajar demasiado ni consumir demasiada energía. Cuando corres durante la menstruación, si la intensidad no es muy alta, generalmente puedes hacer un trote ligero de forma adecuada. Pero no se recomiendan las carreras de 100 vallas, las carreras de velocidad de corta distancia, las carreras de larga distancia y el maratón.
Para las mujeres que menstrúan, está bien hacer un jogging ligero según su condición física, pero correr demasiado intenso estimulará la espalda y la cintura, provocará una mayor congestión en la cavidad pélvica, acelerará el flujo sanguíneo y facilitará la circulación. provocar una menstruación abundante o prolongada.
¿Cómo correr durante la menstruación sin verte afectada?
Si estás durante la menstruación, se recomienda trotar principalmente, tratar de reducir la cantidad de ejercicio y acortar el tiempo de ejercicio, generalmente unos 15 minutos son los adecuados, principalmente para relajar los músculos. Este tipo de jogging adecuado ayuda a mejorar la circulación sanguínea en el cuerpo.
¿Qué tipo de ejercicio es apropiado durante la menstruación?
Tres días antes de tu período, puedes decidir la forma de ejercicio según tu propia situación, centrándote en ejercicios suaves, calmantes y relajantes, como yoga meditación, gimnasia elemental o simplemente haciendo algunos estiramientos sencillos en casa. Al quinto día de la menstruación, el cuerpo comienza a recuperarse. En este momento, puede empezar a caminar, trotar y realizar otros ejercicios aeróbicos. Sin embargo, debemos evitar algunos juegos de pelota y deportes de mucha carga.
¿Qué ejercicios no se pueden realizar durante la menstruación?
Se deben evitar los ejercicios fuertes durante la menstruación, especialmente aquellos que provocan un aumento de la presión abdominal, como salto de longitud de pie, saltar la cuerda, abdominales, carreras de larga distancia, etc.
Porque si la presión abdominal aumenta repentinamente, no sólo provocará fácilmente cambios en el volumen del sangrado, sino que también puede provocar infecciones ginecológicas. Durante la menstruación, el ejercicio extenuante también puede hacer que la sangre menstrual regrese de la cavidad uterina a la cavidad pélvica, lo que provoca endometriosis, dismenorrea e incluso infertilidad a largo plazo.