La educación es en realidad sólo una etiqueta para una determinada experiencia de vida. No representa la verdadera capacidad ni los logros futuros de una persona. No podemos decir que las personas buenas con altos diplomas sean necesariamente excelentes, ni podemos decir que las personas malas con bajos diplomas no sean excelentes.
De hecho, mirándote en retrospectiva, tienes un buen trabajo y un novio de una de las mejores universidades nacionales, que son suficientes para demostrar tu excelencia. La excelencia de una persona no se refleja en un diploma, sino en sus palabras, hechos y capacidad de trabajo.
No tienes que preocuparte por tu universidad. Los logros pasados son cosa del pasado. Deberías afrontarlo con calma. ¿Qué tipo de universidad importa? No se lo ocultes a tu novio. Si lo amas, dile con franqueza que la persona que realmente te ama se preocupa por ti y no tiene nada que ver con nada más.
Haz un buen trabajo y vive una buena vida, y serás el mejor. ¡vamos!