Tus padres están orgullosos de tus logros y no se arrepienten de tus esfuerzos. ¡No te avergüences, solo dilo en voz alta! ¡Hazles saber a tus padres que has crecido y deja que los tíos y tías presentes vean que eres un niño sensato!
Al brindar, sólo hace falta decir: ¡gracias por venir a bendecirme! ¡Así que el ambiente durante toda la cena será muy cálido; mis mejores deseos para ti!