El artículo de muestra del diario de observación del frijol mungo es el siguiente:
1. Artículo de muestra 1
Hoy comencé el experimento de observar el frijol mungo. Primero, preparé algunos frijoles mungo y un poco de algodón húmedo. Coloco los frijoles mungo sobre algodón y los cubro con un recipiente transparente para mantener la humedad. A continuación, coloqué el recipiente en un lugar cálido para proporcionar un entorno de cultivo adecuado.
El primer día, los frijoles mungo todavía parecían secos y no hubo cambios. ¡Pero a la mañana siguiente, descubrí que los frijoles mungo comenzaron a brotar! Sus cáscaras se rompen, revelando tiernos cogollos verdes. Estaba muy emocionado porque significaba que los frijoles mungo estaban empezando a crecer.
A medida que pasa el tiempo, los brotes del frijol mungo se hacen cada vez más largos y el color se vuelve verde más brillante. Observo atentamente sus cambios todos los días y los anoto en mi diario de observación. Noté que las raíces de los frijoles mungo se alargaban gradualmente y las puntas de los brotes se expandían gradualmente hasta convertirse en hojas.
Aprendí mucho sobre el crecimiento de las plantas observando el proceso de crecimiento del frijol mungo. Aprendí que las plantas necesitan agua y luz solar para crecer, y que su crecimiento es gradual y requiere paciencia.
El experimento de observar frijoles mungo me hizo amar más la naturaleza y apreciar más el milagro de la vida. Espero seguir realizando más experimentos de observación en el futuro para explorar los misterios de la naturaleza.
2. Ensayo de muestra 2
Por la mañana, comencé a observar un frijol mungo. Las semillas del frijol mungo son pequeñas, lisas y de color verde claro. Su forma es redonda y plana, con una superficie lisa y sin líneas evidentes. Coloqué los frijoles mungo sobre un trozo de gasa de algodón húmeda y lo cubrí ligeramente con otra capa de gasa de algodón húmeda. A continuación, lo coloqué en un lugar cálido y luminoso para proporcionar un ambiente adecuado.
Por la tarde, descubrí que la apariencia de los frijoles mungo había cambiado. Absorbe agua, crece y se hincha ligeramente en la superficie. Puedo ver rastros de humedad en el hilo de algodón, lo que indica que los frijoles mungo están absorbiendo humedad.
A la mañana siguiente, continué observando el estado de los frijoles mungo. Para mi sorpresa, ¡descubrí que los frijoles mungo se habían abierto! Una plántula blanca emergió del medio y se estiró hacia afuera. Esta es la raíz y el tallo del frijol mungo en crecimiento. Las raíces son muy finas y suaves, se extienden hacia abajo en busca de nutrientes, los tallos son muy verdes, crecen hacia arriba extendiendo pequeñas hojas.
Al tercer día, observé la asombrosa tasa de crecimiento del frijol mungo. Los tallos se alargan y las hojas se hacen más grandes. Estas hojas son de color verde oscuro, como tiernos brotes verdes. Puedo ver claramente un pequeño capullo en la parte superior del tallo, que es donde el frijol mungo se convertirá en una planta de soja.
A medida que pasan los días, los tallos del frijol mungo se vuelven cada vez más gruesos, y las hojas se vuelven más densas. Noté unas pequeñas depresiones en las hojas, que son las venas. Las hojas convierten la luz solar en energía a través de la fotosíntesis y ayudan a las plantas a crecer. El último día de observación, descubrí que el frijol mungo se había convertido en una pequeña plántula de frijol mungo.
Al observar el proceso de crecimiento del frijol mungo, sentí profundamente la magia de la naturaleza y el poder de la vida. Cultivar frijol mungo es un proceso maravilloso que me hace apreciar y valorar aún más la belleza y diversidad de la naturaleza.
3. Ensayo de muestra 3
Esta semana, el profesor de ciencias nos pidió que plantáramos frijoles mungo y observáramos su crecimiento. Tan pronto como llegué a casa, tomé un plato hermético, le puse toallas de papel y luego le puse unas semillas de frijol mungo. Finalmente le vertí una cantidad adecuada de agua para observar su crecimiento y desarrollo.
A la mañana siguiente, lo primero que hice al levantarme fue acercarme al alféizar de la ventana para mirar las semillas de frijol mungo. Cuando caminé hacia el alféizar de la ventana, encontré una grieta en la piel de las semillas de frijol mungo. Por la tarde, la grieta se hizo cada vez más grande y finalmente salieron los cogollos. Al tercer día, todas las semillas de frijol mungo brotaron, algunas eran largas o cortas, algunas gruesas y otras delgadas. Lo que fue aún más emocionante fue que a una semilla de frijol mungo le creció una raíz y estaba firmemente arraigada en la toalla de papel.
Unos días después fui a ver las semillas de frijol mungo y vi que crecían en ellas unas hojas pequeñas, puntiagudas como unas tijeras. Después de unos días, las tijeras crecieron mucho, casi tan grandes como las hojas, y los brotes de las semillas de frijol mungo también se hicieron cada vez más largos, y finalmente se convirtieron en tallos de frijol mungo.
Grabé todo lo que vi y se lo informé a la maestra en la escuela.
Nunca pensé que una pequeña semilla pudiera tener una vitalidad tan fuerte. Debemos aprender de él.