En los Estados Unidos, las aulas varían mucho de una universidad a otra. Debido a la diversidad de métodos de enseñanza y la no estandarización del plan de estudios, ningún curso es exactamente igual. Sin embargo, a pesar de la diversidad de instituciones de educación superior, las aulas de las universidades y facultades estadounidenses todavía comparten algunas similitudes.
Participación activa
En muchos cursos, la participación en clase no sólo está permitida sino esperada. Algunos profesores basan su evaluación final de los estudiantes en su participación oral. Aunque algunos cursos se imparten formalmente y los estudiantes se encuentran en un estado pasivo (como escuchar conferencias y tomar notas), muchos cursos se organizan en torno a debates en el aula, preguntas de los estudiantes y discursos informales. En los seminarios de posgrado, los profesores desempeñan el papel de "gerentes" y los estudiantes hacen presentaciones y participan en más debates. En seminarios como este, los estudiantes realmente enseñan.
El estilo de enseñanza de un profesor es otro factor que determina el nivel y el tipo de participación de los estudiantes. A algunos profesores les gusta controlar las discusiones, mientras que otros prefieren facilitarlas en lugar de dirigirlas. Muchos profesores alientan a los estudiantes a cuestionar y desafiar sus ideas.
En la enseñanza de ciencias naturales y matemáticas, el modo que tiene el profesor de controlar el aula suele ser tradicional: el profesor da clase y los estudiantes toman notas. Durante las últimas dos décadas, han surgido nuevas tendencias educativas en la enseñanza de la antropología y las ciencias sociales. Por ejemplo, en las clases de educación, sociología y psicología, los estudiantes a menudo deben trabajar en grupos para resolver problemas, diseñar programas, hacer presentaciones temáticas y realizar estudios de casos. Desde entonces, algunas universidades han prestado más atención a la "aplicación" que a la "teoría" y han puesto más énfasis en el "hacer" y la participación.
Relación profesor-alumno
Muchos profesores creen que un ambiente informal y relajado en el aula promueve el aprendizaje. No es raro que los estudiantes tengan una relación relajada y amistosa con sus profesores. Un profesor desordenado no es necesariamente una persona grosera, pero aun así es respetado por sus alumnos. Aunque los estudiantes están subordinados, algunos profesores los tratan por igual. Pero no importa lo que quieran hacer los profesores igualitarios, siguen en una posición de autoridad.