¿Qué es el estrés laboral y cómo gestionarlo?

El estrés laboral se refiere a la presión causada por el exceso de trabajo, el cambio de puestos de producción, las responsabilidades laborales excesivas o cambiantes, etc. La presión laboral proviene principalmente del entorno externo y de la esperanza interior de las personas. La presión moderada puede dar a las personas una sensación de logro al desafiarse a sí mismas, mientras que la presión excesiva puede causar una psicología poco saludable, como ansiedad y depresión, que puede provocar enfermedades físicas como dolores de cabeza.

En primer lugar, mejorar el clima laboral. Los gerentes deben esforzarse por crear un ambiente de trabajo relajado y agradable, como una temperatura adecuada y una distribución razonable, que ayuden a los empleados a reducir la fatiga y trabajar de manera más cómoda y eficiente.

En segundo lugar, crear una cultura organizacional cooperativa, emprendedora y orientada a las personas. Para lograr este objetivo, primero debemos aumentar la conciencia de cooperación y apoyo mutuo entre los empleados. Cuando se enfrente a una feroz competencia en el mercado o a tareas arduas, todos se apoyarán mutuamente como grupo y la moral será más alta de lo esperado; al mismo tiempo, debe haber una comunicación activa entre superiores y subordinados; El estrés no es terrible, la clave está en detectarlo y eliminarlo a tiempo. La comunicación puede adoptar la forma cara a cara, discusión o creación de un buzón de sugerencias. Algunas empresas extranjeras suelen adoptar la forma de "reuniones tribales", donde todos tienen el mismo estatus y voz, lo que da a los empleados un mayor sentido de propiedad y responsabilidad y reduce las barreras de comunicación.

En tercer lugar, la gestión de los requisitos de tareas y roles. Principalmente desde el trabajo en sí y la estructura organizacional, las tareas deben ser claras y los roles deben enriquecerse para incrementar los factores motivadores del trabajo y mejorar la satisfacción laboral, reduciendo así las posibilidades de estrés y tensión.

Método de gestión:

El primero es el sistema de trabajo flexible. Permitir que los empleados decidan libremente cuándo venir a trabajar durante períodos de tiempo específicos. El sistema de horario flexible favorece la reducción del ausentismo, la mejora de la productividad y la reducción de los gastos de horas extras, mejorando así la satisfacción laboral de los empleados y reduciendo el estrés;

El segundo es la participación en la gestión. Los empleados se sentirán inseguros acerca de los objetivos laborales, las expectativas laborales y la evaluación que sus superiores tienen de sí mismos. Estas decisiones afectarán directamente el desempeño laboral de los empleados. Por lo tanto, si los gerentes permiten que los empleados participen en la toma de decisiones, pueden mejorar su sensación de control y ayudarlos a reducir la presión del rol;

El tercero son los planes de salud física y mental. Estos programas comienzan con la mejora de la salud física y mental de los empleados. El supuesto teórico es que los empleados deben asumir la responsabilidad de su propia salud física y mental y que la organización les proporciona los medios para alcanzar sus objetivos. Por ejemplo, las organizaciones generalmente ofrecen diversas actividades para ayudar a los empleados a dejar de fumar, controlar su dieta, perder peso y desarrollar buenos hábitos de entrenamiento.

El cuarto es aliviar eficazmente el estrés. Las organizaciones deben ser plenamente conscientes de que es normal que los empleados estén estresados ​​e insatisfechos. Entonces la organización tiene la responsabilidad de ayudarlos a ajustar sus emociones. Sólo cuando los empleados expresan su insatisfacción pueden lograr el equilibrio psicológico y la estabilidad emocional. Por lo tanto, los gerentes organizacionales deben desarrollar una variedad de salidas emocionales para mejorar efectivamente los incómodos síntomas de estrés de los empleados;

En quinto lugar, esforzarse por crear condiciones que ayuden a los empleados a completar su trabajo. Organizar a los empleados para que realicen capacitaciones para mejorar sus capacidades laborales, como capacitación en habilidades laborales, capacitación en habilidades de negociación y comunicación, etc., para ayudar a los empleados a superar las dificultades en el trabajo. Además, debemos mejorar constantemente el hardware y el software para respaldar el trabajo de los empleados y no podemos hacer demandas irrazonables independientemente de la situación real;

Sexto, tomar medidas especiales para empleados especiales. Por ejemplo, brindar más ayuda y apoyo a los empleados que viajan con frecuencia, porque pueden tener más conflictos entre el trabajo y el cuidado de sus familias. Se enfrentan a un entorno laboral más complejo y cambiante, por lo que están bajo mayor presión.