Si es una persona fácil de comunicar, puedes optar por disculparte en persona; si tiene mal carácter, también puedes optar por enviarle un correo electrónico para expresarle tus disculpas. Si lo acepta, debería tomar la iniciativa de hablar contigo. Si él no toma la iniciativa de hablar contigo, tú debes tomar la iniciativa de hablar con él después de un día. En este momento, aunque no te haya perdonado, no debería estar tan enojado como antes.
No importa si estás invitado a cenar o no. Lo importante es que después de obtener su perdón, no debes volver a cometer los mismos errores o similares, porque si eres reincidente, ¡la posibilidad de obtener el perdón es muy pequeña! ¡recordar!