1. Hay muchas teorías sobre el origen de comer huevos a principios del verano: primero, los antiguos creían que los huevos redondos simbolizaban una vida feliz, y comer huevos a principios del verano podía ser una oración. paz en el verano.
2. La segunda es la costumbre de "comer huevos a principios de verano evitará que sufras el calor del verano cuando hace calor". Comer huevos a principios de verano puede prevenir síntomas comunes del verano como, por ejemplo. pérdida de apetito, fatiga corporal, debilidad de las extremidades y pérdida de peso.
3. En tercer lugar, comer a principios de verano es lo más nutritivo y puede aliviar la fatiga. En verano, el cuerpo humano consume mucha energía, por lo que conviene prestar atención a los suplementos nutricionales, y los huevos pueden aportar ricos nutrientes.