Específicamente, los gráficos en artículos de investigación científica pueden mostrar a través de datos experimentales que una sustancia puede contaminar el medio ambiente o causar daño a la salud humana. Por ejemplo, una sustancia química puede tener efectos tóxicos en el agua, y un gráfico de los resultados experimentales puede mostrar que la tasa de mortalidad de los organismos en el agua aumenta a medida que cambia la concentración de la sustancia química. Por poner otro ejemplo, un determinado alimento o medicamento puede tener efectos secundarios en el cuerpo humano. Los investigadores muestran a través de un gráfico el número de reacciones adversas que experimentan los pacientes después de tomar el alimento o medicamento.
Sin embargo, la relación causal nociva de sustancias específicas requiere una investigación y verificación en profundidad. Los gráficos de los artículos de investigación científica solo muestran los peligros potenciales de una determinada sustancia y deben verificarse y confirmarse en estudios posteriores. Además, el grado de daño de diferentes sustancias puede variar debido a una variedad de factores, por lo que es necesario considerar exhaustivamente otros factores (como la dosis, el tiempo de exposición, la frecuencia de uso, etc.) para evaluar el daño de las sustancias al medio ambiente y salud humana.