Las películas que muestran comportamientos violentos también pueden volver violentas a las personas. Cuanta más violencia vemos, menos sensibles nos volvemos. La violencia entonces no parece mala y no nos lleva a cometerla. Hemos tenido varios incidentes de niños en las escuelas que portan armas y cometen actos violentos. Debemos darnos cuenta de que las consecuencias del acto de matar son eternas. En las películas, los actores pueden morir y seguir apareciendo en otras películas, dejándonos confundidos a la hora de comprender las consecuencias y conectarlas con la realidad.
El cine y la televisión tienen efectos negativos sobre la salud. Ver televisión es una actividad pasiva. Esto nos vuelve inactivos. Si vemos demasiado, nos volvemos perezosos, tanto física como mentalmente. Con el tiempo, nos volvemos insalubres. Dejamos de usar nuestra imaginación. Preferimos ver un partido de deportes que jugarlo. Preferimos visitar a los personajes de las series de televisión "Friends" y "Seinfeld" que charlar con nuestros propios amigos. ¿No es emocionante cuando damos vida a nuestra imaginación?
El cine y la televisión también nos proporcionan una rica fuente de conocimiento. La televisión amplía la ventana al mundo al mostrar los avances de la investigación en diversos campos de estudio. Ver programas de televisión y películas nos expone a diferentes culturas y razas. Es fácil superar nuestros prejuicios internos. Además, películas de guerra como Gladiator y Pearl Harbor enfatizaron los aspectos históricos de la política griega y mundial. Películas como "Harry Potter" y "El señor de los anillos" están adaptadas de libros de autores famosos, lo que muestra hasta qué punto los escritores imaginaban lo sobrenatural.
El mayor beneficio de ver televisión es que reduce nuestro estrés. La televisión y el cine nos permiten escapar de nuestros problemas, aunque sólo sea por un rato. A veces, incluso pueden mostrar una forma positiva de resolver un problema que todos enfrentamos. Pueden ayudarnos a resolver problemas en lugar de huir de la vida.
Es cierto que la televisión y el cine pueden tener un impacto negativo en nuestro comportamiento, pero también pueden provocar cambios positivos en nuestra vida. El impacto en el comportamiento depende de cuánto miras, qué miras y cómo reaccionas ante lo que miras.