Ahora que los recursos educativos son más ricos y eficientes que antes, la disponibilidad de profesores se ha vuelto más importante. La cualidad que debe tener un maestro de escuela primaria no es cuán fuertes sean sus habilidades profesionales y calificaciones académicas, sino que ama a sus alumnos tanto como ama a sus propios hijos. Ante las demandas de decenas de niños al mismo tiempo, lo que necesita no es una educación de alto nivel, sino el cuidado de los profesores. De hecho, esta idea no es errónea, pero tampoco es del todo correcta.
El salario de los profesores de primaria y secundaria no es alto, pero tampoco bajo. Sus responsabilidades son mayores que las de los profesores de secundaria o incluso de la universidad. Debes saber que muchos de los hábitos de los niños se desarrollan desde la infancia. Si conoces a un buen profesor, seguro que le encantará aprender, lo que será de gran ayuda para sus futuros estudios. Por otro lado, si el maestro con el que te encuentras no tiene sentido de responsabilidad, no tiene paciencia con él y simplemente exige resultados ciegamente, entonces al niño definitivamente no le gustará aprender con el paso del tiempo y los resultados empeorarán cada vez más. y los estudios futuros no serán mucho mejores.
En mi opinión personal, creo que es importante exigir a los profesores que tengan un título de posgrado, pero más importante aún, que sean responsables, solidarios y tolerantes. Ayude a los niños a enamorarse del aprendizaje, a disfrutar del aprendizaje y a pensar mientras aprenden, enséñeles los tres puntos de vista correctos y déjelos tratar todo con corazón. Esto es lo más importante y será de gran ayuda en el futuro.
No es una buena señal que el colegio sólo pregunte qué tan altas son las calificaciones académicas del profesor. Además de enseñar, los profesores también tienen la responsabilidad de educar a las personas. En el pasado, todo el mundo pensaba en el puesto de profesor. ¿Enseñar a la gente? Hoy en día, muchos profesores sólo enseñan pero no educan a la gente. Ésta también es una cuestión en la que vale la pena reflexionar.