¿Alguna vez te has despertado sintiéndote incómodo y débil?
¡La razón fundamental de esto es la postura al dormir!
Si no duermes bien, tendrás dolores de cabeza, de cuello, de espalda y, en ocasiones, incluso te despertarás en mitad de la noche sintiéndote débil.
Dormir boca arriba
Cuando dormimos boca arriba, el colchón sostiene nuestra columna. Al dormir boca arriba, la espalda está recta, no doblada ni torcida, lo que tiene un efecto positivo en nuestra columna y cuello.
Al dormir boca arriba, el cuello está en una posición neutra y la almohada no es probable que esté demasiado alta. Demasiado alto causará molestias en la columna cervical, hará que te sientas dolorido por la mañana e incluso afectará la respiración. A veces es posible dormir cómodamente sin almohada.
Dormir de lado
Está mal dormir de lado. Te sentirás incómodo cuando te despiertes al día siguiente. ¡Esta es la forma correcta de abrirlo para dormir de lado!
Coloca una almohada entre tus rodillas y tobillos. (Propósito: enderezar la posición esquelética de la parte superior del cuerpo)
Esto es para asegurar que las articulaciones de la cadera, las articulaciones de las rodillas y las articulaciones de los tobillos estén en una línea horizontal para evitar causar tensión muscular en las caderas o la espalda baja. .
Por supuesto, mucha gente prefiere poner una pierna delante. Esto puede provocar mucha torsión en las articulaciones de la cadera y la zona lumbar, provocando molestias e incluso dolor.
Coloque almohadas debajo de las rodillas para asegurarse de que las articulaciones de la cadera, las rodillas y los tobillos estén en línea horizontal, lo que puede mejorar la mala postura original para dormir.
Coloca una almohada entre tus brazos y el pecho. (Propósito: enderezar la posición esquelética de la parte superior del cuerpo)
También hay muchas personas que involuntariamente encogen el cuerpo cuando duermen de lado, lo que puede causar torsión de la columna superior del cuerpo y sujeción excesiva del pecho. , lo que produce tensión muscular.
La mayoría de nosotros tenemos una mala postura cuando estamos despiertos. Si seguimos tensos mientras dormimos, os podéis imaginar el estado de nuestra columna cervical.
Para mejorar esta situación, necesitamos colocar una almohada entre el brazo y el pecho. De esta manera la columna estará en una posición natural sin torsión excesiva, y el pecho y los músculos no estarán demasiado tensos.
Elige la altura adecuada de la almohada (propósito: reducir la presión innecesaria en el cuello)
La altura de la almohada también es fundamental. Las almohadas demasiado altas o demasiado altas pueden ejercer una presión innecesaria sobre el cuello.
Ve a dormir boca abajo
A muchas personas les gusta dormir boca abajo y les resulta difícil conciliar el sueño incluso si no duermen boca abajo. Dormir boca abajo es la mejor posición para dormir. Porque cuando duermes boca abajo, tu columna vertebral está en un estado antinatural y los músculos desde el cuello hasta la parte superior de la espalda y la parte inferior de la espalda están en un estado de tensión. El arqueamiento excesivo de la zona lumbar también puede causar dolor lumbar. Junto con la torsión constante de un lado de la cabeza, también hará que la columna cervical se gire durante mucho tiempo, provocando dolor de cuello. La postura de las piernas también provocará diversos grados de tensión y estiramiento en los músculos de las piernas. Día tras día, puede provocar fatiga muscular y dolor.
¿Qué pasará si no duermes bien?
Nuestra columna vertebral tiene curvaturas fisiológicas únicas, incluidas las curvaturas cervicales y lumbares; en circunstancias normales, los músculos, tejidos y huesos de nuestro cuerpo deben evitar estar en posturas incorrectas durante mucho tiempo para evitar lesiones repetidas por compresión. La posición correcta e ideal para dormir debe mantener la curvatura fisiológica normal de la columna y garantizar la relajación natural de los músculos de todo el cuerpo. De lo contrario, dormir 8 horas y repetirlo durante muchos años puede provocar molestias en la columna o físicas, como rigidez en el cuello.
Cada uno tiene sus propios hábitos de sueño, por lo que no existen requisitos fijos para las posturas para dormir, pero en general, se recomienda elegir la posición para dormir del lado derecho, porque esta posición ejerce menos presión sobre el corazón. y los pulmones también se reducirá considerablemente la probabilidad de tener pesadillas durante el sueño, lo que será de gran ayuda para mejorar la calidad del sueño de las personas. Si tiene algunos hábitos de sueño poco saludables, debe corregirlos a tiempo para evitar daños al cuerpo.