1. Si se desempeña de manera sobresaliente en el trabajo docente posterior y logra buenos resultados docentes, es posible que pueda obtener un establecimiento docente formal. Aunque sus ingresos han disminuido, todavía tiene un envidiable cuenco de arroz de hierro.
2. Si un docente no quiere seguir trabajando en la industria educativa, puede rescindir el contrato laboral con la escuela, y la escuela privada le proporcionará los subsidios correspondientes. Los docentes cuyas cotizaciones a la seguridad social alcancen los 15 RMB pueden solicitar la jubilación anticipada en función de las circunstancias reales.
Los ingresos de los profesores de escuelas privadas no son bajos. Estos profesores veteranos que han trabajado en el puesto durante más de diez años generalmente continuarán y la jubilación anticipada también es una buena opción.
3. No todos los colegios privados se han convertido en colegios públicos. Las escuelas que cumplan con los estándares de las "seis autonomías" seguirán manteniendo sus calificaciones originales. También descubrirán y aprovecharán algunos docentes excelentes entre los docentes que se han transferido de empleos privados a empleos públicos, y seguirán teniendo empleos bien remunerados. Los profesores que tienen una gran capacidad de enseñanza o que han asistido a las mejores clases suelen ser los que buscan.
4. Los docentes que se jubilan de las escuelas privadas deben elegir el camino que más les convenga en función de su situación real. Los profesores deben tener objetivos claros y no deben seguir ciegamente lo que hacen otros profesores y dejar que la naturaleza siga su propio curso. Con el tiempo, es posible que descubran que este camino no es para ellos. En última instancia, no sólo se desperdicia tiempo y energía, sino que también se daña su futuro.