Derrota la gentileza y la inocencia voluntaria.
Un toque suave en la brisa sólo puede darte la vuelta impotente.
En ningún lugar puedo buscar mi inocencia perdida.
En aquella época nos gustaba estar despistados en clase y siempre llenos de preguntas después de clase.
Somnolencia. Eso es juventud ignorante.
Estamos recordando con atención ahora.
Cuando caminaba solo, no podía vernos al anochecer.
La brisa nocturna también me hizo sentir un poco de frío.
Un hombre caminaba en el banco de piedra al lado del patio de recreo al anochecer.
Las luces del aula hicieron sonar el timbre a lo lejos.
En aquella época nos gustaba desconectarnos en clase.
Después de clase siempre hay muchas preguntas.
Somnolencia. Eso es juventud ignorante.
Estamos recordando con atención ahora.
Caminando solo no se puede ver el crepúsculo. Una vez el viento de la tarde me hizo sentir un poco de frío.
Un hombre caminaba en el banco de piedra al lado del patio de recreo al anochecer.
Estuvimos en el aula de la Clase 1 el verano pasado.
Cada mañana hay una cruel cuenta atrás escrita en la pizarra.
El escritorio está lleno de libros altos, lo que nos facilita el sueño.
Abre el cajón, el papel de prueba es muy grueso.
Aún faltan unos segundos para que terminen las clases. Déjame ayudarte a calcularlo con precisión
Junto a ella está Mulla. Anoche no durmió en toda la noche y todavía tenía sueño en clase.
Cuando estaba leyendo por la noche, escuché el sonido de lobos hambrientos cantando canciones coloridas.
Espiando la puerta, se deslizó silenciosamente y empujó la puerta entreabierta.