En Japón, ponerle una corbata a alguien significa pedirle que se suicide. No sólo no se pueden regalar corbatas, sino que tampoco se pueden regalar collares. Se estima que muchos hombres en Japón han ahorrado mucho dinero gracias a este tabú popular.
Se dice que existe la costumbre en Japón de que cuando se regalan verduras, pescado, pollo y flores, sólo se pueden entregar en la puerta del propietario. Si envía dinero en efectivo, normalmente lo pone en un sobre. Es muy tabú entregar el dinero directamente. El sobre que contiene el dinero también tiene dos caras. Al enviar dinero para eventos festivos, el lado de los caracteres de la nota debe coincidir con el frente del sobre. Si envía dinero a un funeral, coloque el lado de los caracteres de la nota hacia la parte posterior del sobre.
Además, al visitar a los pacientes en el hospital, no se pueden enviar flores en macetas ni crisantemos. El primero significa desear que alguien muera temprano y el segundo se usa para funerales.
A la novia no se le puede dar té. Hay un dicho en China que dice que "una hija casada es como agua que se tira", y en Japón hay un dicho que dice que "una hija casada es como té que se tira". Enviar té a la novia es como pedirle que no vuelva nunca más a casa. A los recién casados no se les pueden regalar cuchillos de cocina ni porcelana. Cuchillo significa cortar la boda. La porcelana es frágil. Por supuesto, cuanto más fuerte sea la relación, mejor. Así que, lejos de ser un regalo de porcelana.
Además, los peines no se pueden regalar. En japonés, peine se pronuncia como "amargo" y "muerte", lo cual trae mala suerte. Cuando se abre una nueva tienda, no se pueden regalar flores rojas porque le recordarán a la gente el "fuego": el fuego, y la gente, naturalmente, lo evitará.