Discutir las características del desarrollo psicológico de los niños con retraso mental y su intervención educativa.

Las características del desarrollo psicológico de los niños con retraso mental:

1. Retrasos en el desarrollo cognitivo.

El nivel de inteligencia de los niños con retraso mental es obviamente bajo y son difíciles. Para afrontar cosas nuevas, aprender lleva bastante tiempo. Su velocidad de procesamiento de nueva información, capacidad de memoria, atención y capacidad de comprensión son significativamente más bajas que las de otros niños normales. Por lo tanto, a menudo necesitan orientación y ayuda de otros y carecen de la capacidad de ser independientes.

2. Comportamiento emocional inestable

Los niños con discapacidad intelectual tienen más probabilidades de tener cambios de humor que los niños normales, que se manifiestan en una alternancia de optimismo y pesimismo, voces agudas y fuertes expresiones emocionales. . Al mismo tiempo, el comportamiento de los niños con discapacidad intelectual también fluctuará debido a influencias emocionales, como la falta de atención, el deseo de atención y la agitación.

3. Capacidad de operación cognitiva débil

Es difícil para los niños con discapacidad intelectual dominar las operaciones cognitivas individuales, como diferencias sutiles de calidad, cambios de tiempo y juicios cuantitativos, etc. les dificulta resolver problemas. Sentir luchas físicas y mentales y ansiedad cuando viven, estudian y socializan.

4. Pocas habilidades comunicativas

Los niños con discapacidad intelectual tienen malas habilidades comunicativas frente a personas de diferentes edades y personalidades, carecen de capacidad de adaptación y de afrontamiento, y son propensos a sufrir. subjetividad Juicio sobre rasgos o carácter, que resulta en sentimientos de miedo o desconfianza.

Intervención educativa:

1. Estimular el interés de los niños con retraso mental a través de juegos interactivos.

En el día a día de los niños con retraso mental es necesario organizarlos. Algunas actividades de juegos interactivos no solo permiten que los niños se relajen, sino que también mejoran su tolerancia al estrés emocional y sus habilidades interpersonales. Además, los educadores también pueden guiar a los niños para que comprendan lentamente el mundo a través de la ciencia popular, libros ilustrados y otras formas, cultivar su interés por el aprendizaje y la curiosidad y mejorar sus habilidades lingüísticas y su inteligencia integral.

2. Estimular adecuadamente el sentido de competencia

Al estimular adecuadamente el sentido de competencia, los educadores pueden promover la motivación de aprendizaje de los niños con discapacidad intelectual, de modo que tengan un cierto yo. -capacidad de regulación y buscar activamente sus propias ventajas y seguirán dándose incentivos psicológicos para abrirse paso. Para los niños con un fuerte sentido de competencia, proporcionar un sistema de recompensa razonable y específico para alentarlos a perseverar frente a las dificultades también puede brindar una garantía para que los niños con discapacidad intelectual tengan un sentido de desafío y logro.

3. Cultivar la capacidad de expresión emocional

Los educadores deben tratar a los niños con discapacidad intelectual desde un nivel emocional y guiarlos activamente para que muestren la capacidad de expresión emocional de los niños normales, incluso guiándolos en Autocomprensión y comunicación emocional, lo que puede promover el autocrecimiento de los niños y adaptarse mejor a los desafíos de las distintas etapas de la vida.

4. Optimizar el ambiente de enseñanza

El ambiente de enseñanza es una parte importante del desarrollo de los niños especiales. Un ambiente de enseñanza dominado por áreas especiales de limpieza, caligrafía, pintura, música, etc. Puede ayudar a los estudiantes a concentrarse y relajarse, mejorar los efectos del aprendizaje. Al mismo tiempo, crear un buen ambiente de lectura y llevar a cabo ricas actividades culturales puede permitir que los niños comprendan mejor el mundo exterior y participen activamente en él.

En definitiva, debido a las diferencias de inteligencia entre los niños con discapacidad intelectual, los programas educativos deben ajustarse según los niveles de capacidad de los niños. Cuando se trata de psicología infantil, los educadores deben trabajar en estrecha colaboración con los padres y expertos para desarrollar programas educativos adaptados a las necesidades de desarrollo de los niños. Además, también debemos centrarnos en cultivar las habilidades de trabajo en equipo de los niños, mejorar su autoestima y su confianza en sí mismos como personas comunes y corrientes, para que puedan seguir absorbiendo nuevos conocimientos, adquirir nuevas habilidades y convertirse en una mejor versión de sí mismos.