El significado del cornejo en la antigüedad: símbolo de la cosecha, símbolo de exorcismo y evitación del mal, símbolo de coraje y perseverancia.
Cornus es una planta importante en la cultura tradicional y se consideraba un símbolo de cosecha en la antigüedad. En otoño, la gente suele colgar ramas de cornejo delante de sus puertas o en el interior de sus casas para rezar por una buena cosecha, paz y felicidad.
Corus officinalis también es un símbolo importante en la antigüedad para ahuyentar a los malos espíritus y evitar el mal. Según la leyenda, en la antigüedad la gente creía que el Dogwood tenía la función de expulsar a los malos espíritus y evitar desastres. Por lo tanto, en algunos festivales o ceremonias importantes, la gente utilizará el cornejo para orar por la paz y la salud.
Además de los dos significados simbólicos anteriores, el cornejo también se considera un símbolo de coraje y perseverancia. Esto se debe a que el cornejo permanece verde en el frío invierno y puede resistir el viento y la lluvia. Por lo tanto, en algunas situaciones que requieren coraje y perseverancia, las personas usarán Dogwood para expresar su inquebrantable, valentía e intrepidez.
El papel del Cornus officinalis en las fiestas y costumbres tradicionales
1. Cornus officinalis en las fiestas tradicionales
Cornus es una de las plantas más importantes de la cultura tradicional. Desempeña un papel importante en muchas fiestas tradicionales. Por ejemplo, durante el Festival Doble Noveno, un festival tradicional, la gente usa cornejo para rezar por la salud y la longevidad. Además, durante el Festival de Comida Fría y el Festival Qingming, dos festivales relacionados con el culto a los antepasados, la gente también utilizará hojas de cornejo para hervir huevos o hacer pasteles de cornejo para adorar a sus antepasados.
2. El papel del cornejo en las costumbres nupciales
Además de desempeñar un papel importante en las fiestas tradicionales, el cornejo también ocupa una posición insustituible en las costumbres nupciales. En la antigüedad, las novias llevaban coronas de cornejo cuando se casaban para mostrar su pureza y lealtad. En los tiempos modernos, la mayoría de las parejas entran a la cámara nupcial sosteniendo ramas de cornejo, lo que simboliza felicidad y satisfacción.