El profesor Kahneman publicó un artículo muy importante en 1979, que se puede decir que es la base de la economía del comportamiento, y ganó el Premio Nobel de Economía en 2002. Después de extensos experimentos e investigaciones, él y su socio Amos Tversky señalaron que los procesos de juicio y toma de decisiones de algunas personas no pueden describirse mediante modelos puramente racionales, y algunas personas son incluso irracionales. Por tanto, el estudio de la economía del comportamiento consiste en comprender cómo tomar decisiones sin depender enteramente del análisis matemático puro y del razonamiento racional puro. Más específicamente, la economía del comportamiento tiene tres direcciones de investigación principales. La primera dirección: en muchos casos, muchas personas toman decisiones basándose en la intuición y la inspiración, o en algunos principios simples aparentemente razonables, en lugar de basarse en modelos detallados y análisis matemáticos. Esta es la llamada segunda dirección heurística: cuando las personas; Ante un problema de toma de decisiones, la forma en que se presenta y expresa el problema, así como muchos factores o ruidos aparentemente relevantes pero en realidad irrelevantes, afectarán la toma de decisiones estratégicas. Éste es el efecto marco: en un sentido amplio; Hable sobre cómo explicar los numerosos resultados observados en el mercado que violan los cálculos matemáticos y el sentido común.
Historia de la investigación de las ciencias de la decisión del comportamiento
Los economistas clásicos, tomando como ejemplo a Adam Smith, el creador de la economía en el siglo XVIII, creen que la psicología y la economía están estrechamente relacionadas. Pero a mediados del siglo XX, los economistas comenzaron a abandonar la psicología, principalmente porque querían definir la economía como una supuesta "ciencia" y tendían a utilizar matemáticas y modelos rigurosos y precisos como base de la investigación económica. Sin embargo, esta tendencia comenzó a revertirse en la década de 1970, por un lado porque los modelos económicos puramente racionales fueron desafiados por muchos resultados experimentales y, por otro lado, con el desarrollo de la ciencia cognitiva, los psicólogos pudieron utilizar sus modelos para modelos puramente racionales. se comparan.