El sueco Johann August Strindberg (1849-1912) fue un pionero del teatro expresionista europeo. Sus obras de los años 1970 y 1980 fueron naturalistas, como "El padre" y "Miss Julie", ambas creadas bajo la influencia de Zola. Sin embargo, a finales del siglo XIX, el expresionismo comenzó a aparecer en las obras de Strindberg. Su obra representativa "Hacia Damasco" (una trilogía, las dos primeras fueron creadas en 1897 y la tercera en 1904) describe la lucha con el destino, el sexo opuesto, la sociedad y uno mismo en forma de monólogo, con el objetivo principal de delinear la trayectoria de los cambios espirituales en la vida de una persona.
Después de eso, el estilo de Strindberg giró oficialmente hacia el expresionismo y publicó obras únicas como "A Dream Play" (1902) y "Sonata for a Ghost" (1907).
Las obras de Strindberg están llenas de pesimismo y a menudo presentan el sufrimiento humano. Por ejemplo, en "Ghost Sonata", Strindberg expuso la oscuridad del mundo y la fealdad de la naturaleza humana a través de bocas de fantasmas, y finalmente concluyó que "el mundo es un manicomio, un burdel y una morgue". Las creaciones de Strindberg sentaron las bases de la creación teatral expresionista.