El verdadero problema de la vanidad y la autoestima

1. De hecho, la vanidad y la autoestima son ambas un estado de ánimo. Desde la antigüedad hasta el presente, tanto hombres como mujeres, viejos y jóvenes, han tenido autoestima. La autoestima puede impulsar a las personas a cumplir más activamente con sus obligaciones y tener un mayor sentido de responsabilidad y espíritu de lucha. Pero si la autoestima está demasiado distorsionada, se manifestará como vanidad, que se manifiesta principalmente en la comparación ciega de comportamiento, ambición, fuertes celos, etc. Esta es una emoción social y un estado psicológico que se muestra para ganar honor y llamar la atención. Todo el mundo quiere ser reconocido y tiene algo de vanidad en mayor o menor medida. Pero tenga cuidado cuando los adolescentes utilicen pretextos falsos para proteger su vanidad.

2. La vanidad generalmente se manifiesta de dos formas: (1) Por cualquier medio necesario, superando a los demás, uno puede obtener felicidad y satisfacción de la brecha. (2) Cuando las condiciones son limitadas y no puedes superar a los demás, sentirás tortura y dolor en las grietas. ? Cuando los adolescentes son demasiado vanidosos, a menudo exigen demasiado a sus padres. Si no cumples con los requisitos, encontrarás otra manera de satisfacer esta vanidad. A veces es fácil extraviarse.

3. ¿Cómo ayudan los padres a los niños con excesiva vanidad? (1) Los padres deben hacerles saber a sus hijos los peligros de la vanidad. Es muy fácil que los adolescentes desarrollen el hábito de mentir si confían en algún engaño o informe falso para proteger su vanidad. La vanidad es muy dañina para los jóvenes que tienen ansias de progresar y están creciendo. La vanidad prolongada también puede provocar malas emociones. (2) Reconocer la autoestima y la vanidad. A medida que los adolescentes se desarrollan mental y físicamente, también aumenta su autoestima. Debemos alentar a los niños a lograr la satisfacción de su autoestima mediante esfuerzos modestos, emprendedores y auténticos. (3) Comprender las necesidades del niño y hacer ajustes razonables. El psicólogo humanista Maslow creía que las personas necesitan motivación para satisfacer ciertas necesidades y que los individuos persiguen diferentes necesidades. Los cinco niveles de necesidades humanas son: fisiológicas, seguridad, pertenencia y amor, respeto y autorrealización. Descubra las necesidades reales de su hijo y cúbralas de la manera correcta. (4) Valores correctos y visión de la vida. En la comunicación diaria, deben decirles a sus hijos que compararse ciegamente con los demás y perseguir ciegamente la vida material no significa mayor influencia y valor. Al mismo tiempo, los niños deben establecer un concepto correcto del consumo. (5) Preste atención a la honestidad y confiabilidad de los niños. Mentir y hacer trampa son una de las principales formas de satisfacer la vanidad. Los jóvenes deben centrarse en la realidad, estudiar para alcanzar ciertos objetivos de valor y superar dificultades y obstáculos en el camino a seguir para realizar sus elevados ideales y ambiciones.