Hoy, cuando estábamos en la clase de composición con bolígrafo dorado, la profesora nos pidió que hiciéramos un juego llamado pintar con los ojos vendados.
Primero la profesora nos pidió que sacáramos las cosas que necesitábamos para usar en el juego: papel, bolígrafos y mochilas. Luego nos pidieron que nos pusiéramos mochilas en la cabeza. Después de ponernos las mochilas, mis ojos se oscurecieron. En ese momento, estaba tan perdido como un pájaro perdido. Entonces escuché a la maestra decir: "Hay una casa, hay un gran árbol al lado de la casa, y hay un pajarito en el árbol..." Siguiendo las instrucciones de la maestra, todos los estudiantes comenzaron a dibujar. Pensé para mis adentros: En la escuela, era bastante bueno dibujando. ¡Definitivamente podré dibujar bien esta vez!
¡Me sorprendió cuando la profesora me pidió que apreciara los trabajos de los alumnos! "¡Ah! ¿Cómo pudo pasar esto? La casa que pinté se convirtió en dos mitades y la mitad del rostro de la niña desapareció." Me dije confundido mientras miraba mi trabajo. Volví a mirar los trabajos de otras personas y resultó que todos eran como yo, ¡y sus pinturas eran muy divertidas! Algunas casas, árboles, niñas y flores están pintadas en el agua; otras están pintadas en el aire. Ver los trabajos de todos me hace reír a carcajadas.
¡Este juego de pintar con los ojos vendados es muy divertido! Espero que la maestra nos deje jugar nuevamente la próxima vez.