Construir la ciudad de Roma requiere grandes ideas, un diseño preciso, una preparación suficiente y una construcción cuidadosa. Roma no se construyó en un día. Para resolver fundamentalmente el problema, necesitamos encontrar la raíz del problema y encontrar una solución. La medicina tradicional china presta atención a "ver, escuchar, preguntar y cortar". Si el problema es una enfermedad, el medicamento adecuado puede curar la enfermedad y rejuvenecer el cuerpo.
Cuando resolvemos un problema, primero debemos considerar cómo surge el problema.
“Un terraplén de mil millas se derrumba en un hormiguero”. Los problemas a menudo ocurren en lugares aparentemente discretos. Los incendios y los accidentes por intoxicación por monóxido de carbono ocurren con frecuencia en invierno, principalmente debido al uso inadecuado de los métodos diarios de calefacción. Los ejemplos incluyen el uso inadecuado de mantas eléctricas y ventilación insuficiente en habitaciones con fuegos de carbón. Por supuesto, no podemos culpar a las mantas eléctricas ni al carbón por estos problemas. Los accidentes de seguridad a menudo son causados por descuido y operación inadecuada. Por tanto, para solucionar el problema lo primero es evitarlo en la medida de lo posible y cortarlo de raíz.
¿Qué debemos hacer si ocurre algún problema?
Este año los japoneses compraron ilegalmente las Islas Diaoyu, lo que provocó que los chinos boicotearan los productos japoneses e incluso los destruyeran. Pero la situación actual del problema es que los productos electrónicos, los automóviles y los electrodomésticos que utilizamos en nuestras vidas se fabrican todos en Japón. Aunque algunas se producen en el país, un número considerable de piezas se fabrican en Japón. ¿Cómo puedo solucionar este problema? La raíz del problema es que los productos nacionales no pueden seguir el ritmo de los productos japoneses en términos de calidad. Por tanto, para solucionar este problema, lo primero que debemos hacer es, por supuesto, fortalecer nuestros productos nacionales. Cuando la calidad de nuestros productos nacionales es mejor o igual que la de otros países, ciertamente no hay necesidad de boicotear. Porque utilizamos nuestros propios productos. Lo mismo ocurre también con otras cuestiones. Naturalmente, para resolverlos, necesitamos ver más allá de las apariencias para ver la esencia: detener el agua hirviendo y no pagar por ello.
En resumen, resolver el problema fundamentalmente no es cavar un pozo, sino prepararse para un día lluvioso; resolver el problema fundamentalmente no es tratar los síntomas sino tratar la causa raíz.