El tránsito de mercancías se refiere a un método comercial que requiere pasar por un tercer país durante el transporte de mercancías dentro de un país o entre dos países. Este método requiere que la mercancía ingrese al territorio de un tercer país y luego ingrese al país de destino de la misma manera. El tránsito de mercancías ocurre en el comercio internacional porque no existe un acuerdo comercial entre algunos países, o porque otros factores (como situaciones políticas, etc.) dificultan las importaciones directas.
El tránsito de mercancías tiene una gran importancia para los países y empresas que intervienen en el comercio. A través del tránsito de mercancías, las empresas pueden aprovechar eficazmente las ventajas de terceros países para transferir comercio y reducir costos, realizando así mejor el flujo de importación y exportación de mercancías. Para los países de tránsito, el tránsito de mercancías también trae enormes beneficios y efectos económicos, y pueden proporcionar servicios económicos a otros países dentro de sus propios territorios.
La implementación del tránsito de carga requiere ciertos intercambios comerciales y cooperación comercial entre los países participantes. Al mismo tiempo, la estabilidad política y las buenas relaciones diplomáticas también son condiciones necesarias para la implementación del tránsito de carga. Dado que el tránsito de mercancías involucra los intereses de múltiples países, también existe un cierto grado de riesgo político durante el proceso de implementación. Si la política y la economía del país de tránsito cambian, o se introducen nuevas políticas comerciales, las empresas nacionales deben ajustar sus estrategias comerciales y su gestión de riesgos de manera oportuna.