El familiar sonido de los pájaros acuáticos volvió a sonar en mis oídos. El agua ondulada del lago es aún más encantadora cuando la mueve el viento.
Igual que ella. ...
El bello rostro, la grácil figura, el agua acariciando el agua con el agua, las manos esbeltas al atardecer. Ella era exactamente la belleza que estaba buscando mientras dormía. Ella es increíblemente hermosa.
Irónicamente, la primera vez que intenté acercarme a ella, fui cortésmente rechazado. Yo, que siempre había tenido confianza, de repente perdí el rumbo, me sentí perdido y confundido, disuelto en vino y ardiendo en mi corazón. Durante varias noches no pude dormir porque sólo pensaba en ella. Pero en los días siguientes todavía no me atrevía a decirle una palabra.
Quería irme, pero antes de irme la volví a ver. Todavía caminaba por el huerto de puerros como un hada, todavía encantadora. Pero no estoy calificado para acompañarla. Solo quiero dejar en paz este lugar desgarrador... Pensando en esto, me sentí triste, desaté la lira atada a mi espalda y canté una canción "Beauty Pity" en solitario. Quería desahogar mi frustración, pero no pude contener mi admiración. Al final de la canción, suspiré de nuevo. Pensé: es hora de irse.
"¿Esa canción es "Beauty Pity"?"
Levanté la cabeza sorprendido. Resultó que no sabía cuándo había estacionado el barco a mi lado. No supe qué decir en ese momento y me sorprendí tanto que olvidé responder.
Ella me miró con una sonrisa. "¿Puedes tocar otra canción, niña?"
"Por favor, dame un consejo, niña".
Durante los siguientes diez días, aproximadamente, todos los días al atardecer, me sentaba by the lake, tocó para ella mientras pasaba junto a Leek y comenzó a cantar junto con la melodía. Aves acuáticas que vuelan bajo, pastores acuáticos meciéndose con el viento y cantos resonaban en el lago... De repente descubrí que este lugar era más hermoso y más prometedor que antes.
Pero ahora, sin ella, el atardecer parece tan desolador.
Las aves acuáticas siguen volando bajo, la bolsa del pastor todavía se balancea con el viento y la lira que tengo sobre mis rodillas hace mucho tiempo que no se toca. No sé si la melodía que toca sigue siendo hermosa.
Sopla una ráfaga de viento, y vuelven a sonar las canciones de amor del pasado, bendiciendo a ella que un día circulaba entre puerros, y bendiciendo a su amado en la distancia. ........