2. Manualidades: Deje que los niños participen en diversas actividades artesanales, como origami, corte de papel, pintura, etc. Estas actividades pueden ejercitar las habilidades prácticas y la creatividad de los niños.
3. Plantar plantas: Deje que los niños planten algunas plantas pequeñas, como brotes de soja, pasto, etc., para que aprendan a observar el proceso de crecimiento de la vida y cultiven su sentido de responsabilidad.
4. Actividades de cocina: deje que los niños participen en algunas actividades de cocina sencillas, como mezclar masa, amasar, etc., para ejercitar su capacidad práctica y su capacidad de vida independiente.
5. Bloques de construcción: los bloques de construcción son una buena forma de ejercitar la capacidad práctica de los niños. Pueden construir varios modelos según su imaginación mientras cultivan su imaginación espacial y su creatividad.
6. Actividades de tejido: deje que los niños intenten tejer algunos artículos pequeños, como bufandas, gorros, etc., para ejercitar su capacidad práctica y la flexibilidad de sus dedos.
7. Dar forma a la plastilina: usar plastilina para pellizcar objetos pequeños de varias formas puede ejercitar la fuerza de los músculos de las manos y la flexibilidad de los dedos de los niños.
8. Utiliza tijeras y pegamento: Enseña a los niños a utilizar tijeras para recortar varias formas y a pegar papel para ejercitar la coordinación de las manos y la motricidad fina.
9. Juegue con arena: Deje que los niños jueguen en la playa o en un arenero y use arena para construir pequeños edificios de diversas formas, que puedan ejercitar la fuerza de los músculos de las manos y la flexibilidad de los dedos.
10. Conviértase en un asistente doméstico: deje que los niños participen en algunas actividades domésticas sencillas, como ordenar la habitación, lavar los platos, etc., que pueden cultivar la capacidad práctica y la capacidad de vida independiente de los niños.