1. Exagerar ciegamente las funciones de los medicamentos, poniendo en grave peligro la salud y la seguridad de la vida y la propiedad de los consumidores.
2. Confundir al público y confundir medicamentos y productos sanitarios.
3. La certificación de calificación descrita en el anuncio es falsa, lo que daña gravemente la credibilidad de la empresa certificadora.